Marruecos, «un socio esencial» en la lucha contra el extremismo (responsable estadounidense)
Marruecos es «un socio esencial» en la lucha contra el extremismo violento, subrayó, el lunes, la subsecretaria adjunta estadounidense de Defensa, Dana Stroul.
«Marruecos es un socio esencial, que comparte los intereses y objetivos de Estados Unidos en la lucha contra el extremismo violento y aborda, no sólo en el Sahel sino en toda África, las condiciones que dan lugar a la expansión de Daesh», afirmó la responsable estadounidense en una conferencia de prensa digital sobre los progresos en la lucha contra esta organización terrorista.
«Son áreas en las que seguimos centrándonos, y nos unimos no sólo a nuestros socios, sino también al Departamento de Estado y a otros departamentos para abordarlas a diario», continuó Stroul.
«También hay una reflexión y planificación activas con nuestros socios en el Sahel sobre cómo trabajar juntos para luchar contra Daesh en la región», indicó la Subsecretaria Adjunta estadounidense de Defensa.
Añadió que «estas son áreas constantes de comunicación y trabajo en las que Estados Unidos, de nuevo, está centrado trabajando con nuestros aliados y socios senciales».
Por su parte, el general de división del ejército estadounidense, comandante de la Fuerza operativa interamada combinada – Operation Inherent Resolve, Matthew McFarlane, indicó que desde principios de este año en Irak -del 1 de enero a la primera semana de abril- se ha producido un descenso del 68% en los ataques de Daesh en comparación con el mismo periodo del año anterior. En Siria, el descenso ha sido del 55%.
«Este último Ramadán ha sido uno de los más pacíficos en años gracias a los esfuerzos combinados de nuestros socios», se congratuló el responsable militar estadounidense.
En su último informe sobre el terrorismo, el Departamento de Estado estadounidense señaló que Estados Unidos y Marruecos tienen «una larga historia de sólida cooperación en la lucha contra el terrorismo».
El Gobierno marroquí ha continuado con su estrategia global en este ámbito, que incluye «medidas de seguridad vigilantes, cooperación regional e internacional y políticas de lucha contra la radicalización», señala el documento.
