Cultura

Fadila El Gadi: Innovación y elegancia con Alma Marroquí 

Fadila El Gadi representa la perfecta amalgama entre tradición e innovación en el mundo de la moda. Nacida en la medina de Salé, ciudad gemela de Rabat, esta diseñadora marroquí ha logrado llevar el arte del bordado tradicional marroquí a las pasarelas internacionales, transformándolo en piezas de alta costura que capturan la esencia de su herencia cultural mientras dialogan con la modernidad.

Recientemente condecorada como Oficial de las Artes y las Letras por la República Francesa, Fadila El Gadi ha consolidado su posición como embajadora del patrimonio textil marroquí. Su compromiso va más allá de la creación de prendas exclusivas; a través de su Fundación y la Escuela de Bordado de Salé, establecida en 2016, se dedica a preservar y transmitir este arte ancestral a las nuevas generaciones, especialmente a jóvenes de entornos modestos.

Sus creaciones, que han cautivado a personalidades como Ivanka Trump, Léa Salamé, Barbara Streisand y Su Alteza Real la Princesa Lalla Hasnaa, son testimonio de un talento excepcional que ha sabido trascender fronteras y elevar el patrimonio marroquí al estatus de arte universal.

Hoy, El Periodico Marroquí tiene el privilegio de presentar una entrevista exclusiva con esta notable creadora. Sra. Fadila El Gadi nos ha abierto su corazón, compartiendo generosamente su experiencia, visión y pasión por el arte del bordado marroquí. A través de esta conversación sincera, nos invita a descubrir no solo su trayectoria profesional, sino también las profundas motivaciones que impulsan su compromiso con la preservación y renovación del patrimonio textil marroquí.

P: ¿Cómo descubrió su pasión por este arte?

FG: Cuando era más joven, era costumbre enviar a las niñas, durante el verano, a talleres para aprender una destreza (bordado, tapicería, costura, etc.). De ahí nació mi pasión por el bordado.

P: Usted creó su propia casa de moda, destacando una artesanía única. ¿Qué desafíos encontró para imponer su visión?

FG: No fue fácil imponerse en un campo dominado por hombres donde los artesanos tenían dificultades para recibir directrices de mi parte; pero con el tiempo y mucha perseverancia, logré imponerme y hacer que los artesanos se adhirieran a mi visión.

P: Su trabajo destaca la riqueza del patrimonio marroquí al tiempo que lo moderniza. ¿Cómo encuentra el equilibrio entre tradición e innovación?

FG: Encontrar este equilibrio entre patrimonio y modernidad proviene de una voluntad de respetar la historia mientras aporto mi visión personal… reinterpreto el bordado de manera contemporánea, fusionándolo con líneas modernas y materiales innovadores. Esto permite destacar la belleza del patrimonio mientras se crea algo nuevo.

P: Recientemente ha sido distinguida como Oficial de las Artes y las Letras por la República Francesa. ¿Qué representa este reconocimiento?

FG: Ha sido para mí un inmenso honor, que testimonia no solo el reconocimiento de mi trabajo, sino también la importancia de la artesanía como vector cultural y artístico. Esta distinción me recuerda la responsabilidad que tengo como creadora de continuar innovando pero sobre todo de preservar el arte del bordado tradicional marroquí.

P: Su compromiso va más allá de la moda, especialmente a través de la formación de jóvenes talentos en su Fundación y escuela… ¿Puede hablarnos de su acción en este ámbito?

FG: La fundación y la escuela tienen un doble propósito: formar a chicas y chicos jóvenes para preservar el bordado tradicional marroquí, pero sobre todo para transmitirles un conocimiento que será una fuente de ingresos y que podrá asegurarles un futuro digno.

Animar a los jóvenes a amar la artesanía y adaptarla a la época actual es ayudarles a comprender que esta herencia puede ser una fuente de innovación y orgullo. Es crucial mostrarles que la artesanía no solo debe preservarse, sino también reinventarse para que siga brillando en el mundo de hoy.

P: La moda es un sector en constante evolución. ¿Cómo ve el futuro de la alta costura marroquí en el escenario internacional?

FG: Se puede decir hoy que la moda marroquí tiene un lugar creciente en el escenario internacional gracias a su autenticidad y su mezcla de tradición y modernidad. Veo su evolución en los próximos años como una apertura aún mayor al mundo, si logramos valorizar nuestro patrimonio y si conseguimos adaptarlo a las tendencias globales. Creo que la moda marroquí seguirá destacándose por su creatividad única y su excepcional saber hacer.

P:Usted ha vestido a personalidades. ¿Hay algún encuentro que destaque?

FG: El encuentro con Sheikha Moza. No solo por lo que representa para las mujeres y en el mundo de la moda, sino también por su elegancia, su refinamiento y su generosidad de corazón.

P: ¿Cree que estas habilidades tradicionales están suficientemente valoradas?

FG: Recientemente se observa un cambio significativo en la percepción. Estas habilidades ahora son reconocidas no solo por su valor artístico sino también por su importancia en la preservación de nuestro patrimonio. Sin embargo, este proceso de valorización es aún relativamente reciente y requiere un apoyo continuo para poder consolidarse y desarrollarse más.

P: ¿Qué consejo daría a los jóvenes creadores que desean seguir sus pasos y abrirse camino?

FG: Que nunca se rindan, que tengan fe en su visión y demuestren una enorme voluntad. El éxito es posible, solo hay que armarse de paciencia.

P: ¿Cuáles son sus próximos proyectos o colaboraciones?

FG: Siempre tengo ganas de crear y el mundo no deja de inspirarme, así que siempre tengo algo en marcha… incluyendo un libro y una nueva colección para hombre.

El recorrido de Fadila El Gadi ilustra perfectamente cómo el patrimonio cultural puede ser reinventado y elevado a nuevas alturas sin perder su esencia. Su reciente condecoración como Oficial de las Artes y las Letras por la República Francesa no solo reconoce su talento individual, sino que también celebra la riqueza del patrimonio textil marroquí y su capacidad para trascender fronteras.

A través de su trabajo como diseñadora y su compromiso con la formación de nuevas generaciones, Fadila El Gadi está construyendo un legado que va más allá de la moda. Su visión combina la preservación del patrimonio con la innovación, creando oportunidades económicas para jóvenes artesanos mientras posiciona la artesanía marroquí en el escenario global.

En un mundo donde la homogeneización cultural representa una amenaza constante, figuras como Fadila El Gadi nos recuerdan la importancia de valorar y reinventar nuestras tradiciones. Su historia es un testimonio poderoso de cómo el respeto por el pasado puede inspirar un futuro brillante y socialmente consciente para la moda y la artesanía tradicional.

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