Elegancia y Refinamiento: El Consulado de Marruecos en Valencia Celebra el 25 Aniversario de la Entronización del Rey Mohamed VI
El Consulado de Marruecos en Valencia organizó recientemente una fastuosa celebración para conmemorar el 25 aniversario de la entronización del Rey Mohamed VI. El evento, que tuvo lugar en el hotel Westin, destacó por una fusión exquisita de tradiciones marroquíes y sofisticación moderna.
La atmósfera de la noche fue un verdadero homenaje a la cultura marroquí, con una decoración suntuosa que incluía farolillos dorados y mesas adornadas con manteles de lino, coronadas con delicadas fuentes de plata llenas de pasteles marroquíes. Todo armonizaba perfectamente con la música tradicional marroquí y flamenca, interpretada en vivo para el deleite de los asistentes.
Los invitados, muchos de los cuales lucían impresionantes caftanes de seda bordados, fueron recibidos con un vaso de leche y dulces marroquíes como la baklava, las ghribas de almendra, y los dátiles rellenos de nueces, creando una atmósfera auténtica y acogedora.
Entre los invitados, destacaba un grupo de mujeres elegantemente vestidas con atuendos marroquíes tradicionales: Fadoua Arfaoui, Zina Barghouti, Souad El Hadri, Farah Attari y Naima El Alaoui. También estuvieron presentes el subdelegado de Gobierno José Rodríguez; la directora general de Emprendimiento e Internacionalización, Ester Olivas; la directora de Anieme, Amparo Bertomeu; la directora del Consejo de Cámaras, Lourdes Soriano; y una notable representación del cuerpo consular en Valencia, incluyendo al cónsul de Hungría, Andrés Goerlinch; el de Estonia, José Vicente Morata; la cónsul de Suiza, Rocío Cibrán, que además es la directora del Westin; el de Uzbekistán, José María Chiquillo; de Países Bajos, Daan Hirs; Hilario Teruel (Burkina Faso); Vicente Soriano (Brasil), Francisca Juliá (Mónaco), Karin Nylund (Francia), Adolfo Porcar (Turquía), Gaspar Ripoll (Alemania), Ernesto Bonet (Guatemala) y, por supuesto, el cónsul de Marruecos, Saïd Drissi el Bouzaidi, quien actuó como anfitrión y dio la bienvenida a todos, recordando las buenas relaciones entre España y Marruecos. El discurso culminó con la interpretación de los himnos de España, Marruecos y el himno a Valencia, respetando así la tradición diplomática.
Después de la recepción en el salón principal del hotel, los invitados se trasladaron al jardín del Westin, decorado con sombrillas de algodón bordadas en oro, evocando el estilo bohemio de la casa de Yves Saint Laurent en Marrakech. Allí se sirvió un buffet preparado por una empresa marroquí, con platos típicos como el tajine de carne, shawarma, crêpes de espinacas con salmón ahumado, y pastelas de marisco y pollo, culminando la noche con el corte de un pastel en honor al 25 aniversario de la entronización.
Fuente : Las Provincias y El periódico marroquí.
