Los fundamentos históricos de la práctica de autonomía en Marruecos pre – colonial:El caso del Sáhara marroquí
Capítulo 2/2

Su Majestad el Rey Mohammed VI a su llegada a El Aaiún en febrero de 2016
Legado histórico: Los Alauitas, saharauis de Tafilalet, descendientes del profeta Sidna Mohamed, han establecido la itinerancia del poder como instrumento privilegiado para el ejercicio directo de la soberanía sobre las regiones fronterizas y estratégicas, en particular la región del Sahara.
5. Los Saadíes, la centralidad de la región del Sahara dentro del Imperio cherifiano
Los Saadíes, Cherifianos del Ued Drâa, propulsaron la región del Saharaen el corazón del Estado y de la economía marroquíes al ubicarla como columna vertebral de las rutas comerciales transaharianas, a la luz de la rehabilitación del eje norte-sur iberoafricano, heredado de los Almorávides, pero abandonado en favor del eje oeste-este del Magreb durante los periodos almohade y meriní.
Las Mahallas de los Sultanes Saadíes en la región del Sahara
Los Saadíes se esforzaron por ejercer, directa y efectivamente, su soberanía sobre las provincias del sur, apoyándose en la práctica del poder itinerante.
Apenas investido Sultán, Mūlay Mohamed Cheikh, hasta entonces gobernador del Sūs y Sūs Extremo, emprendió, en el año 1566, una Mahalla en las provincias del sur que lo llevó a Haouza (provincia de Smara), en los límites de Ūed Sakia Al Hamra “Acequia el Hamara”; expedición en la que participó el viajero e historiador español Mármol Carvajal (1524-1600), quien la describe en el prólogo de su obra «Descripción de África».
En esta misma localidad de Haouza, cerca de Smara, el Sultán Mūlay Ahmed Al-Mansūr Eddahabi concedió una audiencia, coronada de prestigio en la tradición sahariana-hassaní, a Sheij Sid Ahmed Rgueibi, epónimo de La tribu de Rgueibat; Primer contacto directo entre unSultán y un jefe tribal del Sáhara marroquí. 17
El Sáhara marroquí, un importante contingente militar en el ejército saadí.
El historiador Andrzej Dziubinski afirma que «los Saadíes otorgaban la máxima importancia a las provincias del sur. Son la cuna tradicional de todos los aspirantes al poder y ellos no olvidaban sus orígenes. Por eso, los oasis al sur del Atlas y el Sahara contaban con las guarniciones más fuertes». 18
Según Dziubinski, la fuerza del ejército saadí, de 63.500 hombres, se distribuye de la siguiente manera: 15.000 provenientes de la región de Sūs y el
valle del Drâa (incluido el Sáhara marroquí), 25.000 de Marrakech y sus dependencias, 20.000 de la región de Fez y una legión extranjera de 3.500 fusileros.
Las tribus saharianas (Rehamna, Ūdaya, Ūlad Dlim, Brabisch… de los Beni Hassan) conforman la caballería pesada.
Durante el reinado del sultán Mūlay Ahmed Al-Mansūr, había nueve regiones: «Sūs y Sūs Extremo (Sahara marroquí), Fez, Tafilalet, Marrakech, Tadla, Drâa, Al-Fahs, Touat-Tigueurarine». Estas regiones se dividían en varios municipios urbanos y rurales. Sin embargo, las ciudades estratégicas, fronterizas o costeras, se benefician de un estatus jurídico especial y son gobernadas directamente por el Sultán.
La Gobernación de Fez generalmente estaba confiada al Príncipe Heredero, que llevaba el título de Califa de Fez, mientras que las demás provincias, especialmente Marrakech, no siempre estaban confiadas a miembros de la familia real. Los Gobernadores desempeñan una misión tanto administrativa como militar.
6. Los Alauitas, un apego inquebrantable a la marroquinidad del Sáhara
Los Alauitas, saharauis de Tafilalet, descendientes del profeta Sidna Mohamed, han establecido la itinerancia del poder como instrumento privilegiado para el ejercicio directo de la soberanía sobre las regiones fronterizas y estratégicas, en particular la región del Sahara. El proverbio dicta que “el trono del emperador de Marruecos es su caballo; su dosel es el cielo.”
En estas provincias remotas e improductivas, el Sultán alauita está representado por los Caïdes o Jeques de Zāwiya, que las administran en nombre del Soberano y gozan de “un gran grado de autonomía”, como ocurría en el Sáhara.
“Poder Itinerante”, instrumento de administración de las Provincias Saharianas
El Sultán Mūlay Ismaïl (1672-1727) no permaneció, durante sus primeros veinticinco años de reinado, un año entero en su palacio mientras que Mūlay Hassan I (1873-1894) dirigió diecinueve Mahallas.
El Sultán Mūlay Ismaïl ostenta el título de Emperador de los dos Reinos, el Reino de Fez, Tafilalet y Marrakech, así como del Reino de los dos Saharas (Sahara Occidental y Sahara Oriental). Además, Designó a su hijo Mūlay El Mamūn como su representante en las Provincias del Sur.19
El cautivo Thomas Pellow, jefe del «Contingente Militar Extranjero – Renegados -«, bajo el reinado del sultán Mūlay Ismaïl, indica que acampó, entre 1731 y 1732, en una de las múltiples Mahallas del Soberano alauita, en «Ūed Noun y Ūed Es-Seguiet el-Hamra», y que una caravana militar ismailí cruza anualmente el Sahara marroquí, en su camino hacia el país de los Chenguit (Mauritania). 18
El Sultán Mohammad III (1757-1790) administró directamente las zonas fértiles, como el Haouz y el Gharb, e indirectamente, las regiones montañosos y desérticas, a través de la intermediación de grandes kā˒id [jefes de la kabīla] y shaykh de zāwiya. 20
La resistencia a la colonización en el Sahara, Vanguardia de la preservación de la soberanía nacional
El último gran Sultán del Marruecos pre-colonial, según la expresión de Jean-Louis Miège, Mūlay Hassan I trabajó incansablemente para salvaguardar la integridad territorial del Imperio cherifiano.
En un contexto de intensificación de las presiones coloniales sobre el único país del Magreb y del Mashreq que preserva su soberanía nacional, el sultán Mūlay Hassan I multiplicó, durante sus 21 años de reinado, las Mahallas y Harkas en el sur de Marruecos. Durante su Mahalla de 1882, nombró a Lhoussaine Ouhachem, Caïd de las Provincias del Sur y, durante la de 1886, a varios otros Caïds y Bachas, en particular a Mohamed Ben Lahbid Tidrari, Caïd de los Ūled Tidrarin.
Además, el Sultán Mūlay Hassan I nombró a dos representantes en el Sahara: el príncipe Mūlay Rachid, residente en Sijilmassa, para gobernar el Sahara oriental, mientras que el segundo «lugarteniente cherifianO», instalado en Marrakech, se encarga de Sūs y Sakia Al Hamra.
En un momento en que el hecho colonial consumido alcanzó su cima, los sultanes alauitas se centraron en preservar la soberanía nacional y la continuidad del aparato estatal a nivel local, incluso en las regiones más remotas del Sahara marroquí.
En 1896, el sultán Mūlay Abdelaziz nombró a Mohamed el Amin, Caïd de las tribus de Aït Lahssen y Yaggout, a Brahim Ben Bahrek Chtouki, Caïd de los Tekna y, en 1906, a Slimane el Arūssi Caïd de El Gourrah de Izerguiyine.
El sultán Mūlay Abdelhafid nombró, por Dahir, en 1909, a Habib Ben Beyrūk, caïd de las tribus Aït Moussa Ou’ali, Regueibat y Ouled Tidrarin.
Proyecto estratégico de Su Majestad el Rey Mohammed VI: el Sáhara en el centro de la gobernanza territorial

Su Majestad el Rey Mohammed VI, Maqueta de Tecnopolo de Fum Al Ued – El Aiyun, 2016
El gran proyecto de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios Le asista, de fortalecimiento del proceso de gobernanza territorial y vincularlo con el programa de desarrollo económico tiene sus raíces en este patrimonio marroquí milenario.
Poner a las Provincias del Sur en la primera línea en los diferentes planes de puesta en marcha de la regionalización avanzada, consagradaen la Constitución de 2011, se inscribe en la empeño de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios Le glorifique, de priorizar a las poblaciones saharauis, habida cuenta de la particularidad de los vínculos soberanos de la Bayaâ y de la centralidad del Sáhara en el Estado-nación marroquí.
En este sentido, el Nuevo Modelo de Desarrollo de las Provincias del Sur, lanzado por el Augusto Soberano en 2015, por un importe de inversión de más de 80 mil millones de dírhams, abarcando un conjunto de infraestructuras de dimensión continental, refleja la voluntad real de hacer del Sáhara marroquí una plataforma de conexión con el África saheliana y subsahariana.

Autopista Tiznit – Dajla
La Iniciativa de Autonomía Marroquí en el marco de la soberanía del Reino y su unidad nacional, presentada al Consejo de Seguridad de la ONU el 11 de abril de 2007, con vistas a cerrar definitivamente el diferendo regional, creado artificialmente hace cincuenta años, en torno a la integridad territorial del Reino, está en armonía con este legado histórico marroquí.

Parques de energía renovable
La dinámica inexorable del apoyo internacional a la marroquinidad del Sáhara y a la Iniciativa de Autonomía conforta la posición justa del Reino.
Estados Unidos, España y Francia, las potencias más comprometidas en la gestión de la ONU de este diferendo regional artificial, reconocen la marroquinidad del Sáhara y apoyan el plan de autonomía.
En la presentación del balance diplomático del año 2024, el Ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, señaló que « 113 países a nivel internacional han brindado su apoyo al plan de autonomía. El número de Consulados Generales en El Aaiún y Dajla asciende a 30, y más de 27 países africanos han abierto representaciones diplomáticas en las ciudades de Dajla y El Aaiún, lo que representa casi el 40 % de los países de la Unión Africana.»
Referencias
محمد نبیل ملین، السلطان الشریف الجذور الدینیة والسیاسیة للدولة المخزنیة في المغرب. 446 ص. 2013 .17
18. La lettre de nomination, datée du 09 novembre 1692, du Prince El Mamoun en tant que Khalifa des Provinces du sud est conservée dans les Archives royales,. (Bahija Simou, Sahara Marocain dans les Archives Royales)
19. Thomas Pellow. The history of the long captivity and adventures of Thomas Pellow in South Barbary, Londres, 1743.
20. Abdallah Laroui. Le Maroc du début du XIXe siècle à 1880, in Histoire générale de l’Afrique, VI : L’Afrique du XIXe siècle jusque vers les années 1880, 6, p. 478-496.