la Unión Africana de Ciegos aprueba sus informes financiero y de organización
La Unión Africana de Ciegos (AFUB) aprobó el domingo en Rabat sus informes financiero y de organización, en el marco de los trabajos de su 10ª Asamblea General.
En esta ocasión, el Tesorero Honorario de la Unión, Bernard Mogesa, presentó el informe financiero de la Unión para el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2020 y el 30 de septiembre de 2023, que abarca todos los proyectos puestos en marcha por la AFUB.
Tras repasar los gastos, las fuentes de financiación y los principales retos financieros a los que se enfrenta la Unión, Mogesa destacó los esfuerzos realizados por la AFUB para reforzar los sistemas de control interno, mediante la normalización de los procedimientos y el uso de la tecnología para mejorar el seguimiento contable.
«Hemos tomado medidas rigurosas para garantizar el buen funcionamiento de la Secretaría en un contexto marcado por las dificultades financieras», afirmó el Tesorero Honorario, confiando en que con el nuevo plan estratégico de la Unión (2022-2026) se alcancen los objetivos de la organización y se superen sus dificultades.
Por su parte, el presidente de la AFUB, Ishumael Zhou, presentó el informe organizativo de la Unión, mencionando el impacto de los desastres naturales y la pandemia en el trabajo de la organización.
Tras señalar que la Unión ha sabido adaptarse a los cambios y hacer un buen uso de las nuevas tecnologías, Zhou insistió en la necesidad de innovar y encontrar nuevas fuentes de financiación para que la organización pueda seguir funcionando.
Tras ofrecer una visión general de las acciones emprendidas por la AFUB, dio las gracias a sus socios y donantes, subrayando la importancia de la cooperación con la Unión Mundial de Ciegos y los organismos nacionales e internacionales, para garantizar una respuesta eficaz a los retos de la Unión.
En cuanto a la formación de los miembros de la Unión, el presidente abogó por la consolidación de los logros, así como por el desarrollo de las capacidades y la continuación de los esfuerzos de defensa ante los gobiernos africanos y las organizaciones internacionales, para promover la integración económica y social de las personas con discapacidad visual.
